Mousse de queso

Salvo los intolerantes a la lactosa, son pocos los que renuncian al queso. Es realmente exquisito y excepto aquellos que no lo comen por razones médicas, todos quieren tenerlo como ingrediente en muchos platos. ¿Te gusta? Pues aquí verás cómo hacer varios tipos de mousse de queso.

Mousse de queso en Thermomix 

Mousse de queso en Thermomix

Ingredientes de mousse de queso en Thermomix 

  • 200 gramos de queso (Philadelphia u otro similar que se prefiera)
  • 250 de nata para montar
  • 50 gramos de azúcar glaseada

Cómo hacer mousse de queso en Thermomix 

Es en Thermomix, lo cual quiere decir que esta receta de mousse de queso es incluso más rápida y sencilla de hacer que la anterior.

Para ello pondremos el vaso del robot de cocina en la nevera por 10 minutos para que se enfríe. Apenas esto ocurra verteremos en él la nata y, con la mariposa puesta en las cuchillas, programaremos medio minuto en la cuarta velocidad y luego reduciremos media velocidad hasta que la nata quede bien montada.

Como habrás de suponer, aunque siempre es bueno aclararlo, la nata de la que hablamos es para montar y por ende debe tener más de un 30 por ciento de materia grasa. No puede ser la que es comercializada en estado líquido para cocinar, ya que no tributará a nuestro propósito de crear una mousse, con su típica consistencia y textura espumosa.

Una vez montada entonces, añadimos a la nata el queso a temperatura ambiente y el azúcar y volvemos a mezclar 30 segundos, pero suavemente, en la primera velocidad.

Si por casualidad todo no quedase bien integrado, nos apoyamos en una cuchara y con movimientos envolventes mezclamos y terminamos por nosotros mismos la tarea.

En este punto ya la mousse de queso en Thermomix está lista para ser servida y enfriada por tres horas, tiempo tras el que todos en casa comprobarán la exquisitez del postre que hemos preparado, ideal para cualquier momento del día y estación del año.

Video de la mousse de queso en Thermomix

Mousse de queso Philadelphia 

Mousse de queso Philadelphia

Ingredientes de mousse de queso Philadelphia 

  • 150 gramos de queso Philadelphia
  • 100 de nata para montar
  • Una lámina de gelatina neutra
  • Una taza de café expreso fuerte
  • Una cucharada sopera de cacao en polvo
  • Cuatro galletas maría

Cómo hacer mousse de queso Philadelphia

Al llevar gelatina, la preparación de esta mousse debe comenzar por la hidratación de ese ingrediente.

Con este fin sumergiremos la lámina de gelatina en agua fría y la dejaremos así durante al menos 10 minutos o hasta que se hinche, señal inequívoca de que está ya bien hidratada.

Mientras esto ocurre ponemos el queso en un bol y lo batimos con ayuda de unas varillas hasta que quede deshecho.

Luego vamos a la nata, que ha de estar lo más fría posible, y la montamos con las varillas.

Al momento de haber hecho esto, la gelatina habrá de estar hidratada, por lo que la escurrimos y la derretimos durante cinco segundos en el microondas o un poco más de tiempo al baño María.

El líquido resultante lo agregaremos al queso Philadelphia y cuando integremos estos ingredientes los añadimos de forma suave a la nata, valiéndonos de movimientos envolventes que permitirán la conformación de una crema uniforme y espumosa: nuestra mousse de queso Philadelphia.

Así, procedemos a verterla en los recipientes destinados para la degustación, cada uno en su fondo con una galleta María, o la que se haya escogido, empapada de café expreso.

Ya solo falta entonces enfriar la mousse por unas seis horas o durante toda la noche, tiempo en el que cuajará perfectamente y alcanzará la textura y temperatura idóneas para la agradable experiencia de su degustación.

Si queremos, justo antes de comerla podemos espolvorearle cacao en polvo por encima, enriquecerá aún más la espectacular mezcla de sabores.

Mousse de queso con arándanos

Mousse de queso con arándanos

Ingredientes de mousse de queso con arándanos

  • Tres claras de huevo
  • 450 gramos de queso (Quark o cualquiera cremoso)
  • Dos yogures griegos naturales y libres de azúcar
  • 100 gramos de azúcar glaseada
  • 20 galletas de mantequilla
  • Un poco de margarina
  • Mermelada de arándanos
  • Un pellizco de sal

Cómo hacer mousse de queso con arándanos

Esta mousse de queso resulta bastante particular por el uso de los arándanos y la relativamente abundante lista de ingredientes.

La preparación se inicia con el desmenuzado o triturado de las galletas, según se prefiera, y el derretido de dos cucharadas de mantequilla, que para hacerlo más rápido podemos acudir al microondas y programar medio minuto a máxima potencia.

Una vez hecho eso, combinamos ambos ingredientes y los removemos hasta obtener una crema uniforme, con sus componentes bien integrados.

Luego vamos a otro bol y mezclamos el queso y los yogures.

Este preparado lo reservamos, para entonces montar las claras con el pellizco de sal. Para este paso unas varillas eléctricas serán de mucha ayuda, ya que acelerarán el proceso de crecimiento y monta de las claras, cuyo término lo indicará la textura, que ha de ser espumosa.

Montadas las claras le añadimos el azúcar glaseada sin parar de batir, hasta que logremos ese merengue brillante y liso que necesitamos para crear una buena mousse.

A este merengue le iremos adicionando el preparado del queso y el yogur, mezclando con movimientos envolventes para que el merengue no pierda su consistencia ni se baje.

Cuando logremos eso, ya estará hecha la mousse de queso.

Antes de servirla pondremos en el fondo de las copas la base que hicimos de galletas y mantequilla y dos cucharadas de mermelada de arándanos. Ya entonces la verteremos en los recipientes, le espolvorearemos por encima algo de canela y azúcar moreno si nos apetece, y la llevaremos a la nevera por tres horas al menos, para que cuaje y enfríe.

Tras ese tiempo ya podemos consumir la mousse de queso con arándanos, que de seguro impactará espectacularmente los paladares de todos los habitantes de casa.

Mousse de queso de cabra 

Mousse de queso de cabra

Ingredientes de mousse de queso de cabra

  • 500 mililitros de nata para montar
  • 100 gramos de queso de cabra
  • 100 de azúcar glaseada
  • 50 de almendras (tostadas y troceadas)
  • Un sobre de gelatina neutra
  • 100 mililitros de miel de abeja

Cómo hacer mousse de queso de cabra 

El queso de cabra natural le imprimirá a esta mousse un sabor muy peculiar, que todos en casa disfrutaremos.

Hacerla requiere tan solo unos pocos pasos que en menos de media hora, cualquier día, podemos hacer para alegrar la jornada.

La primera acción consiste en batir la nata con el azúcar hasta que quede montada, con una textura esponjosa. Para esto resultan muy útiles unas varillas de batir, que además de ahorrarnos tiempo garantizan una mejor calidad en el resultado final.

Una vez tengamos la nata montada, que ha de tener más de un 30 por ciento de materia grasa, y la azúcar bien integrada a ella, agregamos el queso y la gelatina, previamente disuelta en la mitad del agua indicada en el sobre.

Mezclamos con continuidad y movimientos envolventes hasta que todo quede bien combinado en una masa homogénea, que en definitiva es ya la mousse de queso de cabra.

Como habrás de saber si conoces de mousses, antes de comerla debemos verterla en los recipientes y refrigerarla por lo menos un par de horas, para que cuaje y se ponga bien fría, que es como se degusta este postre tradicional de la culinaria francesa.

Si eres de decorar tus postres, a esta mousse de queso de cabra le puedes verter por encima un poco de miel y almendras o cualquier otro fruto seco troceado en fragmentos pequeños.

Mousse de queso mascarpone 

Mousse de queso mascarpone

Ingredientes de mousse de queso mascarpone

  • Un huevo
  • 200 gramos de queso mascarpone
  • 150 de nata para montar
  • 60 de azúcar blanca

Cómo hacer mousse de queso mascarpone

Sin dudas, por su textura cremosa el queso mascarpone es uno de los mejores para hacer exquisitas mousses. En este caso basaremos la elaboración del citado dulce en él como ingrediente principal, algo que nos tomará solo unos pocos pasos si lo hacemos en una batidora estándar.

Así, primeramente juntamos en el vaso de la batidora el huevo, el azúcar y el queso mascarpone y batimos por un par de minutos.

Luego procedemos a montar la nata, que debe tener un contenido de materia grasa superior al 30 por ciento (si es 35 mejor).

Cuando la nata haya alcanzado el punto de nieve, a lo que nos ayudarán mucho unas varillas de batir, volvemos a los otros tres ingredientes y nos esforzamos mezclando para que queden perfectamente integrados.

Solo si conseguimos esto juntamos entonces la mezcla a la nata, lo que debemos hacer poco a poco y con movimientos que vayan de arriba abajo, de forma envolvente. Ello prevendrá que la nata se nos baje y dé al traste con la consecución de la textura espumosa que toda mousse requiere.

Una vez todo esté combinado en una masa uniforme, la mousse de queso mascarpone, la ponemos en el congelador media hora, intervalo necesario para que enfríe y cuaje completamente.

Tras ese tiempo podemos sacar la mousse y decorarla al gusto, si es que vamos a hacerlo, con fragmentos de frutas, hojitas de menta, mermelada o cualquier cosa, lógica, que se nos ocurra. Hecho esto debemos llevarla nuevamente al frío por un mínimo de dos horas y no podemos sacarla hasta al menos 15 minutos antes de degustarla.

La mousse, de queso mascarpone o no, es un postre que se consume semifrío, estado que permite el pleno disfrute de la armónica combinación de sabores.

Mousse de queso fresco 

Mousse de queso fresco

Ingredientes de mousse de queso fresco 

  • Dos claras de huevo
  • Cuatro cucharadas de azúcar blanca
  • 250 gramos de queso fresco

Cómo hacer mousse de queso fresco 

Al igual que todas las anteriores, esta receta de mousse de queso fresco es de muy fácil elaboración.

Para empezar se bate el queso fresco con la mitad del azúcar, hasta que queden bien integrados.

Luego se procede a montar las claras a punto de nieve, con la ayuda de una batidora de varillas eléctrica para ahorrar tiempo y obtener un resultado óptimo.

Una vez montadas, se les agrega el resto del azúcar y se vuelve a batir para que se complementen en un mengue brillante y liso, al que inmediatamente iremos agregando poco a poco el queso, con movimientos suaves de arriba abajo, que garanticen una plena integración.

En este punto, tras unas sencillas operaciones, ya estará lista la mousse de queso fresco.

Para consumirla solo restará que la sirvamos en los recipientes individuales, preferentemente copas para respetar la tradición de degustación de este tipo de postres, y los llevemos a la nevera por unas dos horas para que la mousse cuaje y se enfríe.

Te parecerá muy simple, pero cuando tanto tú como tus familiares prueben este dulce quedarán prendados, al punto de que lo harán muchas veces más, sin importar la hora del día ni si estamos en el más recio invierno.

Tarta de mousse queso 

Tarta de mousse queso

Ingredientes de tarta de mousse de queso

  • Tres claras de huevo
  • 300 gramos de queso crema
  • 15 galletas María o similares
  • 50 gramos de mantequilla semederretida
  • Igual cantidad de azúcar
  • Tres o cuatro láminas de gelatina neutra
  • 100 gramos de leche condensada
  • Mermelada para la cobertura de la tarta

Cómo hacer la tarta de mousse de queso

Para hacer esta tarta de mousse de queso necesitaremos un molde redondo desmontable, con un diámetro de unos 18 o 20 centímetros.

Lo engrasaremos en su base y paredes con un poco de spray desmoldante o, en su defecto,  mantequilla, para prever que la tarta se pegue y dificulte el desmoldado.

Hecho esto ponemos a hidratar la gelatina en agua fría por unos 10 minutos y trituramos las galletas, que mezclaremos con la mantequilla semiderretida para crear una pasta.

Esta crema la esparciremos de forma uniforme en la base del molde, que reservaremos en la nevera para que se enfríe un poco mientras trabajamos con los restantes ingredientes.

Así, en un bol juntamos la mitad del queso y las hojas de gelatina ya hidratas y  previamente escurridas. Esto lo batiremos bien hasta que los ingredientes se fusionen a la perfección, para entonces incorporar el resto del queso y la leche condensada, y batir hasta que esas nuevas incorporaciones se mezclen homogéneamente con todo lo demás.

Acto seguido montamos en otro recipiente las claras de huevo a punto de nieve y cuando ya estén cerca de alcanzar ese estadío les vamos agregando poco a poco el azúcar, sin dejar de batir hasta que el resultado sea un merengue firme y brillante.

Conseguido el merengue, le vamos incorporando entonces suavemente y mezclando con movimientos envolventes la mezcla de queso. El resultado de esta operación será ya una mousse de queso, que verteremos entonces sobre la base de galleta del molde.

La mousse la distribuiremos de forma pareja y la prensaremos con nylon transparente y fino en el frío por varias horas o preferiblemente durante toda la noche.

Minutos antes de consumir esta exquisita tarta de mousse de queso a la que hemos dado forma, retiramos el molde de la nevera, le echamos mermelada por encima a nuestra creación y desmoldamos con mucho cuidado para que no se dañe.

Con probar un bocado veremos cuán rica es y probablemente querremos más, aunque es mejor no ser glotón y compartir la tarta, para que todos en casa reconozcan nuestras dotes haciendo exclusivos postres.

Proceso de elaboración del queso paso a paso

Aunque pueda parecer complicado hacer queso, la verdad es que esta tarea es mas fácil de lo que parece. Y los resultados son muy buenos, sobre todo si usamos materia prima de calidad que nos ayude a conseguir una leche de muy buena calidad. A la hora de ponerte manos a la obra, debes recordar que en el mercado hay muchos tipos de quesos. Dependiendo del tipo de queso que quieras elaborar, el proceso y la curación será una u otra.

Pasos para fabricar queso

Coagulación

Lo primero que tenemos que hacer es tener leche de calidad. Cuando la tengas, lo siguiente que tendrás que hacer es cuajarla para que puedas separar fácilmente la cuajada del suero de la leche.

Drenaje

Lo siguiente que debes hacer es extraer el suero de la leche, para lo cual tendrás que dejar escurrir muy bien la cuajada. Así conseguirás el nivel de humedad que te interesa. Dependiendo del tipo de queso que quieras elaborar, tendrás que adquirir un kit para hacer queso u otro. Para que sepas cual es el que mejor se adapta a tus necesidades, te recomendamos que le eches un vistazo a esta selección de kits para hacer queso. Así verás que opción es la que mejor se adapta a tus necesidades.

Prensado

El tercer paso que tenemos que dar es introducir la cuajada en moldes, los cuales darán una forma u otra al queso. Luego habrá que hacer presión para que gracias a los moldes se pueda expulsar el exceso de humedad que todavía tenga la cuajada. Cuanta más presión hagas, más seco será el queso.

Durante esta etapa también se produce el salado del queso. Gracias a este salado se evita que la producción de ácido láctico vaya demasiado rápido y se le aporta un plus de sabor. Por este motivo, usar la dosis perfecta de sal es muy importante.

Curación

Esta fase también es conocida bajo el nombre de maduración. Es la fase donde el queso irá tomando forma, se hará más queso e irá tomando sabor. Cuanto más tiempo de curación, mas sabor y más fuerte será. Dependiendo del tipo de queso que quieras realizar, el tiempo de curación deberá ser de mas o menos tiempo.

Para una correcta curación, el queso tendrá que depositarse en zonas especiales para su curación o en cuevas. Sino el queso no se curará correctamente y en consecuencia el resultado final no será el adecuado. Es muy importante controlar la humedad, la temperatura y el oxígeno.